Cosecha, recauda, pero el campo no deja de quejarse

RETENCIONES, EXPORTACIONES
“En los últimos meses del presente año se evidenciaron importantes incrementos en los precios internacionales de los principales granos, que si bien no lograron superar los máximos valores registrados en 2008, claramente estuvieron por encima de los precios históricos”, sostiene el último informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).

Cuando se acerca fin de año, comienzan los balances de lo que ocurrió y las perspectivas. El sector agropecuario realiza el mismo ejercicio, pero el resultado lo esconde bajo siete llaves. A pesar de los constantes reclamos para que el gobierno baje las retenciones, la producción de la campaña cerealera 2010-2011 va a alcanzar los 33.800 millones de dólares, muy por encima de los 26.000 millones durante 2009-2010 y los 19.000 millones de 2008-2009. “En los últimos meses del presente año se evidenciaron importantes incrementos en los precios internacionales de los principales granos, que si bien no lograron superar los máximos valores registrados en 2008, claramente estuvieron por encima de los precios históricos”, sostiene el último informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF). La soja concentra cerca del 70% de las exportaciones agropecuarias y los exportadores rezan para que el precio del “yuyo” se mantenga en los niveles actuales cuando comience la etapa de la cosecha. La oleaginosa cerró el jueves a 495 dólares en la bolsa de Chicago, mientras que a principios de 2010 estaba en torno de los 360 dólares. Según estimaciones del sector, la producción de la campaña podrá arañar los 50 millones de toneladas en caso de que no se agudice el fenómeno de “la Niña” (precipitaciones menores a las normales). El resto de los cereales tampoco estuvieron exentos de subas. El girasol cotizaba a 400 dólares a principio de año y ahora está por encima de los 600. El maíz costaba cerca de 180 dólares en enero de 2010 y la semana pasada cerró a 249, mientras que el trigo pasó de los 220 a los 287 dólares en tan sólo doce meses.Estos precios, que están por encima de los promedios históricos pero levemente por debajo de los alcanzados durante 2008, incentivaron a los dueños de los campos a aumentar la producción. Así, el valor total de esta campaña estará cerca de los 34.000 millones de dólares. El aumento de los precios y de la producción impactará positivamente en las cuentas del fisco. El gobierno podrá recaudar, a través de las retenciones, entre 8 y 9.000 millones de dólares, que serán distribuidos entre todas las provincias a través del Fondo Federal Solidario. Por ejemplo, Buenos Aires recibirá 1.909 millones de dólares, mientras que San Juan, que no tiene producción de soja, percibirá 294 millones de dólares. A pesar de la creación de este fondo, el próximo reto para el gobierno será avanzar en políticas que fomenten el cultivo de otros cereales o incentive la cría de ganado vacuno, a fin de que la producción agropecuaria no se concentre en la soja. Sucede que las exportaciones de este cultivo suelen tener poco valor agregado y en buena medida está manejada por grandes grupos económicos, y no por pequeños y medianos productores.